Al principio me hizo gracia los posts burlándose de la aprobación al matrimonio homosexual en Estados Unidos, de verdad, y hasta decidí simplemente ignorarlos precisamente por ser movidos por la ignorancia y el desconocimiento, pero me sigo preguntando, ¿Por que les afecta tanto? O por qué permiten que les afecte si aprobar el matrimonio homosexual no limita ninguna de sus libertades y es algo que solo los atañe a ellos. Deberíamos recordar que ser mayoría no pone a nadie en posición de poder burlarse o juzgar la autenticidad y validez de los deseos y sentimientos que la realidad interior de cada persona pueda contener; ni de impedir a otros entrar en los acuerdos que, inspirados en estos sentimientos y deseos puedan querer celebrar.

Todos los argumentos en contra del matrimonio homosexual caen por ser meras falacias lógicas, que el matrimonio está hecho para procrear? Entonces se debe negar el matrimonio a las parejas que no están en edad reproductiva? o a personas estériles? Que afecta la institución católica o tradicional del matrimonio, por qué? A caso se esta obligando a la iglesia a casar homosexuales? Y además, no defendemos la libertad religiosa? No se ha visto acaso en todas las culturas del ser humano conductas homosexuales, no es entonces algo natural en la especie humana? O acaso es delito que yo sea ateo o testigo de jehova? Que afecta a las familias ? Preferimos entonces que un niño no pueda ir a la escuela, ni tenga para alimentarse o vestirse a que viva en una familia de padres homosexuales que se aman, le brindan amor, comida, salud, educación y estabilidad?. Y ni hablar de los argumentos tergiversados de crímenes, a caso no hay heterosexuales que violan, roban o asesinan? Es acaso ser católico, estar casado, o ser heterosexual la única manera de ser una buena persona?

Se les a ocurrido a estas personas respetar al prójimo y su individualidad? Reconocer y validar sus sentimientos en vez de querer imponer a la fuerza sus ideas satanizando a la misma naturaleza humana?

Juzgar lo que no conocemos y ofender por nuestros prejuicios es lo que siempre nos ha causado las mas grandes desgracias, porque, al fin y al cabo, ese ha sido el motor de todos los genocidios de la historia.